LAS SEÑORITAS DE AVIGNON · PICASSO

Hoy voy a hablar de uno de los cuadros más importantes de la historia del siglo XX.

Es una obra en la que aparecen 5 figuras femeninas desnudas y en la parte de abajo está pintado un bodegón en el cual hay uvas, sandía, una manzana y otra fruta que no sabemos si es una pera o un pimiento ¿Un pimiento es una fruta? NO SABEMOS, ¡Como es cubista! A SABER. 

Se trata de “Las señoritas de Avignon” de Pablo Ruiz Picasso, que también es el artista más importante del siglo XX.

Todo importante.

Picasso vivió gran parte de su vida en París y a todo el mundo que le preguntes te dirá que era francés. Pero nació en Málaga.

Por cierto, en Málaga está el Museo Picasso y la primera vez que lo visité vi al fondo de una de las salas a Las Señoritas de Avignón, pero claro, no era el original. Se trataba de una copia porque el original está en el MoMA, museo de arte moderno de Nueva York. Y es grande. Mide 24 3,9 × 23 3,7 cm.

Para entender bien el porqué de estos cuerpos humanos tan raros hay que entender la clave del cubismo.

¿Y que es el cubismo?

Para que todo el mundo me entienda. Imagínate que hay una modelo tumbada en una tarima. Imagínate a Picasso frente a la modelo dibujándola. Empieza el dibujo. Desde donde Picasso le está viendo pinta uno de sus ojos, la parte lateral de la nariz, y una de las piernas. Entonces Picasso se mueve hacia la derecha y desde ese punto de vista le pinta el otro ojo, una oreja (porque desde ese punto se ve la oreja) y le pinta la otra pierna y parte de los pies. Después vuelve a moverse y ve la espalda de la modelo. Todas esas visiones las pinta en el mismo cuadro.

Al final conceptualmente te aparece una imagen que sería más realista, incluso diría yo hiperrealista porque te muestra muchos aspectos de la misma figura, pero realmente lo que has pintado es una deformación de la realidad. Muy filosófico, ¿no?

Aunque también hay algo que a mí me gusta mucho en el cubismo y es la introducción del tiempo en la obra. Al moverte alrededor de la modelo lo que estás incluyendo es el tiempo. Si Picasso pinta a la modelo desde un solo punto de vista, está haciendo una especie de fotografía. Pintaría una instantánea, un segundo de lo que está viendo. Pero si se mueve a su alrededor incluye el tiempo en el cuadro.

Para hacer esta obra Picasso también se dejó influenciar por las esculturas africanas, en las cuales se trabajan la simplificación de la forma y los planos amplios de color, pero también podemos encontrar muchas similitudes entre esculturas ibéricas del siglo III o II a. C. 

Es decir que Picasso para ser el más moderno de todos se fue a lo más antiguo de todo.

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Volviendo a Picasso, en la obra predominan los colores rosados blancos y azules. No existe ni el volumen ni el espacio. Todo está expuesto de manera plana. 

Y lo que realmente vemos cuando miramos el cuadro es a 5 mujeres que se muestran desnudas frente al espectador, es decir frente a nosotros.

La primera, la que aparece por la izquierda, está levantando una cortina que parece que quiere mostrarnos a las mujeres que estaban detrás. Nos da la bienvenida al cuadro.

Parece todo un secreto. Las dos figuras centrales tienen los brazos levantados para mostrar su cuerpo en su plenitud.

En la parte derecha vemos a otra figura con la cara verde y roja y uno de sus pechos es literalmente un rombo. Parece que sale del fondo del cuadro detrás de otras cortinas.

La última figura está sentada de espaldas frente a nosotros, pero nos mira.

Por último aparece ese bodegón en la parte central inferior.

¿Pero qué es lo que estamos viendo? Yo se que Picasso era un pintor autorreferencial. El pintaba lo que veía. Efectivamente. Durante toda su vida retrató a las mujeres con las que estuvo, pintó a sus amigos, a sus animales, se hizo muchos autorretratos, y la mayoría de historiadores coinciden en que esto es la imagen de un prostíbulo.

En 1907 Picasso vivía la Bohemia en París.

Y la Bohemia se ha asimilado muchas veces tanto al alcohol, a otras drogas, a la mala vida y a este tipo de prácticas. Que a veces pienso yo si este cuadro no sería una visión del Picasso con cuatro copas de más mirando a estas mujeres a través de un caleidoscopio o bien si el calidoscopio lo tenía incorporado por estar un poco borracho.

En realidad pienso que realmente Picasso era muy inteligente, y aunque este cuadro no fue del gusto popular cuando lo hizo, en su cabeza si estaban las referencias a obras como “Las tres bañistas” de Paul Cézanne o también “El juicio de Paris” de Pedro Pablo Rubens. 

Picasso era un gran investigador del arte. Durante toda su vida hizo interpretaciones de obras conocidas, como por ejemplo las Meninas.

Y no olvidemos que a los 13 años de edad Picasso fue matriculado en la Escuela de artes de la Loja en Barcelona y que estudió en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Además visitaba mucho el Museo del Prado y se dedicó un tiempo a hacer copias de cuadros de allí. Se nutría de otros de la obra de otros artistas para hacer la suya.

Pero este cuadro no lo ideó así Picasso desde el principio. Como buen dibujante y conocedor de las leyes de la composición, Picasso realizó estudios en varios bocetos antes de empezar a pintar la obra definitiva.

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Bien. Pues Picasso realizó varios bocetos. En uno de ellos se pueden ver a estas 5 figuras femeninas, pero también aparecen 2 figuras masculinas. Una de ellas está en el centro del cuadro y la otra está en la parte izquierda. Estas dos figuras no formaron parte de la composición final. Las suprimió. 

Por sus vestimentas parece que se trataba de un  marinero y de un artista. ¿Sería él el que estaba en el centro? ¿Visitaría Picasso ese burdel con su amigo?

Cuando pintó este cuadro ni siquiera le puso título. Lo llamaban el burdel filosófico. Pero fue uno de sus amigos el que lo llamó “Las señoritas de Avinyó”, porque Avignyó era una calle de Monmartre donde había un prostíbulo.

Pero la gente, de tanto decirlo confundió la palabra Avignyó con Avignon, la ciudad. Y al final se le ha quedado ese nombre. 

¿Y porqué he dicho antes que este cuadro es tan importante para la historia del arte?

Este cuadro es el inicio de un nuevo movimiento que fue el detonador de todas las vanguardias. El CUBISMO. La libertad formal y conceptual que aportó les allanó el terreno a todos los que vinieron después; el futurismo, el surrealismo, la abstracción, etc. 

Pero el nacimiento no fue ni fácil ni rápido. Picasso lo pintó en 1907 pero no se expuso hasta 9 años después en 1916.

Como no era comprendido por la gente por su modernidad le costó mucho venderlo. De hecho sus amigos André Bretón y Aragón le echaron una mano y convencieron a Jacques Doucet para que lo comprara en 1921 a un precio muy bajo. 

Obviamente porque no existía Instagram ni el curso de CÓMO VENDER TU ARTE EN INTERNET. En este caso otro gallo hubiera cantado. Pero Pablo no podía pinchar aquí y vender su obra justamente.

Pero ¿Por qué no está en España como el Guernica?

Porque como siempre los que tienen mejor ojo para el arte se nos adelantaron y en 1939 fue adquirido por el MoMA donde permanece hasta la actualidad.

Con esto quiero decir que deberíamos tener mejor ojo para los artistas.

Desde aquí hago un llamamiento ya no solo a las autoridades competentes, al rey de España, a los directores y directoras de museos y a los amantes del arte; inviertan en arte y no dejemos escapar otro cuadro como “Las señoritas de Aviñón”. Regalen arte. Inviertan en sus artistas. Colaboren para que el buen arte se quede en casa.